¿Qué es la Comfort Food?

Si alguna vez tuviste un mal día o un mal año, y luego de comer un buen plato de comida te sentiste un poco mejor, ese buen plato de comida es una “comfort food”.

No tiene por qué ser una milanesa con papas fritas o una torta de chocolate, aunque estas comidas suelen ser súper efectivas.

En esencia, es cualquier comida que tenga el poder de darnos una sensación temporal de bienestar cuando estamos sintiendo algún dolor físico o emocional. Las comidas dulces o saladas, altas en carbohidratos y grasas (como el chocolate o las papas fritas) tienden a mejorar nuestro humor porque activan el sistema de recompensas de nuestro cerebro.

Este sistema es el que se encarga de notar cuando sucede algo bueno que vale la pena recordar y repetir. Es el sistema que se activa cuando escuchamos música o nos juntamos con amigos. También es el sistema que va a disparar luces si deciden reescribir la última temporada de Game of Thrones.

Y acá la cosa se pone personal. Ya que además de las comidas mencionadas anteriormente, una comida que nos parezca rica o que tenga valor emocional también estimulará el sistema de recompensas y nos hará sentir mejor.

Como el sabor y nuestra relación con la comida varía según nuestra biología y nuestra cultura no hay una lista de comfort foods verdadera, sino que depende de cada uno.

Pueden ser comidas caseras que asociemos a la infancia (sfihas de carne y knishes de papa en mi caso) o comidas que asociemos a ocasiones especiales, como el asado o el vitel toné en Navidad. Incluso puede ser romper un poco la dieta y darse el gusto con alguna comida elaborada.