El ajo de estación

¿Te gusta el Allium sativum? Se trata de una planta perenne con hojas planas y delgadas, que contiene un bulbo (de piel blanca) que forma una cabeza dividida en gajos, los famosos dientes.

El ajo tiene su origen en la antigüedad. Es una de las primeras plantas usadas para el tratamiento de enfermedades, incluso se han encontrado referencias bíblicas. Los antiguos egipcios lo consumían hace 6.000 años, donde sus propiedades culinarias y medicinales eran alabadas por ellos.

Algunas fuentes indican que los monjes medievales masticaban dientes de ajo para protegerse de la peste. Mientras que durante las guerras mundiales del S. XX (ante la escasez de antibióticos) se utilizaron para evitar que las heridas de guerra se infectaran.

A pesar de ser considerado un ingrediente importante para la cocina (muchos son fanáticos), cabe destacar que no cuenta con valores nutricionales altos (es por eso que se consume en pocas cantidades).

Sin embargo es rico en otros componentes como la aliína una sustancia que en contacto con el oxígeno del aire, se convierte en alicina, responsable de su característico olor. A su vez la alicina se transforma en otros compuestos azufrados con interesantes propiedades terapéuticas…

Tips para el consumo de ajo

Si calientan un diente de ajo entero, van a desaprovechar gran parte de sus propiedades.

 

La mejor manera de consumir el ajo es crudo.

 

Si quieren cocinarlo, macháquenlo bien media hora antes, así permiten que se formen las sustancias beneficiosas; las cuales resisten el calor.

Son muchas las fuentes que hemos leído y muchas hablan de innumerables propiedades terapéuticas sin embargo es importante siempre hablar con un profesional para asegurar su adecuado consumo en las comidas.

Share on facebook
Share on twitter
Share on email

Últimas Notas